Dado que las enfermedades relacionadas al hígado se vuelven cada vez más frecuentes, se vuelve indispensable mantener la salud de este órgano protegiéndolo de cualquier tipo de amenaza. El hígado se encarga de más funciones de las que pensamos, más de 500 para ser precisos, desde facilitar la digestión o almacenar vitaminas indispensables hasta eliminar toxinas y bacterias patógenas del torrente sanguíneo.
Sin embargo, según American Liver Foundation, más de 100 millones de personas solo en Estados Unidos padecen algún tipo de enfermedad hepática y no lo saben debido a que los síntomas se revelan una vez que la enfermedad se encuentra bastante avanzada.
Así, mientras que la hepatitis vírica, la más frecuente entre las enfermedades hepáticas, tiende a la caída, enfermedades como las del hígado graso no alcohólico (EHGNA) o las lesiones vinculadas al alcohol se han vuelto cada vez más recurrentes.
El aumento del consumo del alcohol en las últimas dos décadas es una de las causas de daños hepáticos, en los cuales se necesita generalmente un trasplante de hígado. No obstante, el principal problema del que se tiene registro en daños hepáticos es la obesidad, indica el Dr. Vinod Rustgi, director del Centro de Enfermedades y Masas Hepáticas del Robert Wood Johnson University Hospital de Nueva Jersey, quien afirma que el paso del tiempo sin duda también expone a un mayor riesgo a quienes han vivido con una enfermedad hepática.
Frente a estos problemas muchos optan por suplementos que desintoxican el hígado, sin embargo, la comunidad científica no está de acuerdo con esta alternativa. «El término ‘desintoxicación hepática’ es muy engañoso y la industria del bienestar lo utiliza para vender sus productos. La función del hígado es desintoxicar y filtrar las sustancias nocivas del organismo, y lo hace realmente bien», afirma la Dra. Mahsa Mansouri, profesora adjunta de Medicina Interna en la Facultad de Medicina Dell de la Universidad de Texas.
Con lo anterior también coincide el Dr. Mazen Noureddin, hepatólogo del Hospital Houston Methodist, quien le aseguró en exclusiva a NotiPress que «el hígado es una fábrica con la capacidad de regenerarse y desintoxicarse». Por lo tanto, «no necesita ayuda adicional para filtrar las toxinas a menos que haya sufrido daños o enfermedades».
En cambio, se recomienda mantener una vida saludable como mejor alternativa para cuidar las funciones hepáticas, entre ellas: consumir alimentos saludables, mantener una dieta equilibrada, como también, coordinarla con actividad física.
Por otro lado, también se sugiere intentar reducir el consumo de alcohol y, en cambio, aumentar el consumo de café, pues a este se le ha vincula con un menor riesgo de enfermedad del hígado graso en etapa avanzada e incluso al cáncer de hígado. A estas recomendaciones se integra, evitar los suplementos innecesarios. La doctora Mansouri aconseja no tomarlos «porque no están regulados por la Administración de Alimentos y Medicamentos, así que no sabemos en realidad lo que contienen. La mayoría no son favorables para el hígado, y algunos pueden causar lesiones hepáticas graves».
NotiPress/Axel Olivares